IGLESIA UNIVERSAL AFROCENTRICA ODUGBEMI... Parte II
El Coleccionista de Insultos...
Sí, en eso intentan
convertirme últimamente… una vez más por pensar diferente…
Tal como lo había previsto
en mi reciente y primer artículo referido al proyecto de ‘Iglesia Universal Afro
céntrica Odugbemi’ (IUAO), las reacciones han sido diversas… unos han
comprendido y aprobado la idea, mientras para otros ha sido un escándalo y un
anatema que -en algunos casos- ha derivado innecesaria e injustamente en
insultos de todo tipo, en descalificaciones personales y en un torrente de
ofensas inexplicables y calumniosas, lo que demuestra que en la filosofía o en el
mensaje que quise transmitir -tal vez- no fui lo suficientemente explícito como
para ser comprendido por todos… Aunque, desde luego, esto de ninguna manera
justifica la posición beligerante e irrespetuosa de algunos que han preferido optar
por la descalificación, la ofensa y la calumnia, en vez de establecer un
diálogo respetuoso, constructivo e inteligente sobre el tema…
No obstante, aunque ya
escribí muy recientemente algo sobre esto en mi muro de Facebook, quiero -una
vez más-, dejar claro que lo que unilateralmente he decidido denominar IUAO
(Iglesia Universal Afro céntrica Odugbemi), no es más que un proyecto, una
idea, un punto de partida de una idea que muchas veces anteriormente he
expuesto de diferentes maneras en algunos medios de comunicación sin obtener
acogida de ninguna clase… es la verdad… Es por ello que ante esa tibieza y
escasa acogida de la mencionada idea sobre una aún hipotética unificación
afro-religiosa a nivel mundial - ¡en la cual personalmente creo y creeré fervientemente!
-, decidí esta vez dar un paso un poco -si se quiere- más audaz en cuanto al
lanzamiento del proyecto como tal… en un intento por insistir una vez más en lo
mismo… Es por ello que he hablado de IUAO como un ente subjetivo significativo
de la idea en sí, el cual -por supuesto- es perfectamente susceptible de
cambiar o de ser finalmente otro, pues lo más importante es el contenido
unificador afro-religioso del proyecto, no en si el tipo de organización y ni
tan siquiera el nombre que finalmente adoptaría…
Por lo tanto, quiero dejar
muy claro -si antes, en mi primer artículo no lo logré- que… Ni el nombre de
IUAO, ni tan siquiera la denominación de ‘Iglesia’, o incluso, la cualidad
‘afro-centrista’ sugerida, son hechos consumados o concretos -¡ni nada que se
le parezca!-, pues única y exclusivamente son ejemplos prácticos que he
utilizado para representar un poco más concretamente la idea o proyecto de ‘iglesia’
que les he expuesto… Incluso, en un intento por hacerme comprender un poco más
en mi mensaje anterior o inicial sobre este tema, recientemente he revisado
dicho mensaje y le he realizado algunas matizaciones o correcciones de manera
que pueda entenderse mejor el sentido de mis palabras y del mensaje en general,
pues comprendo y reconozco que, a veces mi estilo de escritura puede no ser tan
claro como algunos esperan… por eso espero que el mencionado mensaje ahora haya
quedado mejor explicado y, por tanto, sea comprendido.
Al respecto, es importante
que se tenga en cuenta que la idea de utilizar la denominación IUAO como
ejemplo para la ‘iglesia’ propuesta en el ‘proyecto para todos los afro-religiosos’,
fue inicialmente la utilizada por el Linaje Odugbemi en Nigeria para
transformar legalmente a OIATYR (Odugbemi International Association for Yoruba
Traditional Religion) -nuestro actual marco legal e institucional en aquel país-,
de Asociación Religiosa (status actual), en ‘Iglesia’ (status deseado), por
considerar a este último más entendible y elocuente para los efectos de mi
exposición anterior sobre el ‘proyecto’, lo cual -al parecer- á traído algunas
interpretaciones no deseadas… Por consiguiente, espero que una re-lectura de
dicho artículo sea lo más aconsejable para conseguir una mejor comprensión
sobre el ‘proyecto’.
Entonces, debe ser asumido
correctamente que, ni la denominación IUAO, ni las cualidades afro-céntricas, y
ni tan siquiera el término ‘iglesia’, son expresiones definitivas, mucho menos
hechos consumados, pues -reitero- éstos términos solo han sido esbozados como
puntos de partida para el análisis y el debate colectivo enriquecedor, el cual
he pretendido estimular entre las masas afro-religiosas con la esperanza de
recoger las aportaciones de todos a la espera de conformar una propuesta
definitiva que recoja el sentir general, pues en todo caso este sería un
proyecto de todos y para todos, y nunca un proyecto de carácter particular, y
mucho menos personal.
Es por ello -reitero
nuevamente-, que el objetivo de lanzar la idea o proyecto de esta manera ha
sido (y, es) únicamente, el de incentivar o estimular el análisis colectivo, el
debate sano, constructivo, inteligente y respetuoso, el de recoger opiniones enriquecedoras
del proyecto en sí, pero jamás el de presentarlo como un hecho consumado, pues
siempre he creído que la participación colectiva y democrática es absolutamente
necesaria y vital para que un proyecto de este tipo tenga posibilidades de
salir adelante…
Y, con esto quiero dejar muy
clara mi posición al respecto, pues -por lo expuesto al inicio-, ya las
especulaciones, y enfoques maliciosos en algunas personas se van poniendo de
manifiesto innecesariamente… aunque por experiencia se, que la historia se
repite, y siempre aparecen quienes -incapaces de involucrarse en un debate
respetuoso, inteligente y constructivo-, prefieren tomar el camino de la beligerancia,
la ofensa, la descalificación, la injuria, la calumnia y, hasta la
utilización de lenguajes inadecuados
rayanos en lo obsceno y lo vulgar… y, sinceramente, creo que -ante el tema que
nos ocupa- todo ese derroche de vulgaridad e intransigencia, sobra… simplemente
está completamente fuera de lugar… Tal es así, que ya algunos hasta han puesto
en mi boca palabras que no he escrito ni he pronunciado relativas a una cierta propuesta
de eliminación de ‘La Adivinación’, ‘Los Sacrificios’ y ‘Las Posesiones
Espíritas’ en las presuntas liturgias futuras que debe poner en práctica dicha ‘iglesia’
proyectada…
Y, lamento tener que solicitar
a esas personas que me atribuyen a mi dichas palabras y afirmaciones, que no me
inmiscuyan en ese tipo de especulaciones emanadas de no sé qué mente… Pues, en ningún
momento he entrado en detalles de ese tipo en los esbozos iniciales de este
proyecto de ‘iglesia’, el cual -como todos sabemos- está aún en una fase muy
temprana de divulgación y análisis, lo cual no da lugar alguno a entrar en
dichos detalles… Al respecto, creo sinceramente que quien me ha atribuido a mí
tales ideas, simplemente no lo ha hecho con buenos propósitos, desde luego… Pues,
lo que busco en estos momentos son únicamente ideas, opiniones y propuestas del
gran colectivo afro-religioso sobre el ‘proyecto’ en general, no sobre sus
detalles y políticas internas, las cuales ni tan siquiera aún han sido
abordadas, por lo que anticiparse en hablar de tales temas como los que se me
atribuyen, no procede…
Es muy constructivo que se
sepa que este ‘proyecto’ de ‘UNIFICACIÓN’ afro-religiosa propuesto, se guiará
exclusivamente por el mandato mayoritario, democrático y libre que surja de las
propuestas de las masas de seguidores y creyentes, porque ellos y ellas serán
los únicos que dictarán las pautas conceptuales, litúrgicas y operativas de
esta aún hipotética ‘iglesia’… Esto quiere decir que, llegado el caso, está ‘iglesia’
funcionaria estrictamente como lo decidan mayoritariamente los afro-religiosos
que se sumen al ‘proyecto’, sobre todo, durante el período de constitución de
sus bases y/o estatutos… No habría lugar -por tanto- para imposiciones, ni
tampoco para dar absolutamente nada por hecho (¡absolutamente nada!), que no
haya sido mayoritariamente votado y/o decidido por el gran colectivo
afro-religioso… Y, esto quiere decir que -nos guste a algunos, o no- todos los
posibles miembros de esta ‘iglesia’ estaríamos obligados a aceptar las pautas,
reglas y normas que sean establecidas por el absoluto consenso de la mayoría… ¡No
guste o no..!
Siempre asumí -antes de
lanzar la idea públicamente-, que ésta levantaría polémicas, debates, y hasta
malas interpretaciones en algunas personas a las cuales -desafortunadamente-
hablarles de temas relativos a ‘unificación afro-religiosa’ y, sobre todo, de
‘Iglesia’, ello hasta les resultaría desagradable y preocupante… pero, les
confieso que jamás se me ocurrió pensar que en algunos sectores levantaría
tantas pasiones… ¡sobre todo la susodicha palabra ‘Iglesia’...!
Y, debo decirles con toda
sinceridad que, en lo personal, el hecho de que se le llame ‘iglesia’, ‘congregación’, ‘grey’, ‘grupo’, ‘rebaño’, ‘seno’, ‘comunión’,
‘parroquia’, o como se le quiera finalmente llamar a
esta hipotética ‘unión afro-religiosa universal’ -que una vez más propongo a
los afro-religiosos del mundo, aún en fase muy temprana de concepción como
proyecto-, en lo que a mí respecta me da igual… pues, reconozco que lo único que
realmente me atrae y motiva de todo esto, es lo que la idea representa en sí como
‘unidad de un pueblo afro-religioso’ y sus posibles consecuencias positivas
para nuestras prácticas y creencias… no sus posibles nombres y/o atributos… Por
lo tanto, yo quiero que en todo este proceso se me vea exclusivamente como un
simple y modesto aportador de ideas, no como líder, ni como jefe, ni como guía,
ni como nada que se le parezca, porque ello no está -ni estará- dentro de mis expectativas
personales… así que a quienes les preocupe esto, ya puede ir quitándoselo de la
cabeza.
Por tanto, ni el nombre, ni
los contenidos de su descripción como ente público que -presuntamente pudiera
llegar a tener finalmente este hipotético proyecto-, en lo personal me
interesan en lo más mínimo… aunque sí debo reconocer que para muchos
ordenamientos jurídicos las diferencias conceptuales y prácticas existentes
entre las entidades legalmente reconocidas como ‘asociación’, ‘fundación’ e
‘iglesia’, les otorgan diferentes niveles de
importancia a la hora de hacerles concesiones… y, sin lugar a dudas, el
trato más privilegiado -entre estas entidades- siempre lo recibe la ‘iglesia’…
¡y, esa ha sido la única razón por la cual pensé en este término como la
sombrilla legal ideal capaz de proyectarnos una sombra protectora debajo de la
cual estuviésemos todos los afro-religiosos’…
Pues, no es un secreto para
nadie que las prerrogativas de las que goza una ‘iglesia cualquiera’ dentro del
orden jurídico internacional, son infinitamente superiores a las que se
conceden a las ‘asociaciones y fundaciones’… ¡Y, esta es la única razón por la
cual he pensado en una denominación social relacionada con una ‘iglesia’ a la
hora de enmarcar esta idea o proyecto… no otra…! Y, por ello les invito a
todos, a consultar las fuentes jurídicas oportunas para que comprueben por
ustedes mismos esta realidad.
O sea, que a los que les
preocupa la susodicha palabrita ‘iglesia’, a esos mismos que hoy me están
virtualmente linchando en las redes y donde se les ocurre, mediante la
publicación de textos agresivos, irrespetuosos, calumniosos y ofensivos -sin
necesidad alguna-, deben saber que simplemente se han precipitado un poco, pues
han reaccionado amparados por razones ‘cogidas con alfileres’, con razones que
no se ajustan a la verdad… han reaccionado con una ferocidad exagerada,
innecesaria e injusta, pues yo he sugerido lo que he creído -y creo- es lo
mejor, el camino más seguro por donde transitar a la hora de buscar una unidad
afro-religiosa en la que personalmente creo y creeré… ¡pero nada más..!
¿Acaso es tan difícil, tan
complicado, el intercambiar opiniones y puntos de vista de manera respetuosa,
seria y objetiva...? ¿Es tan complicado expresar con respeto y educación un
sentir, un criterio, aportar ideas sobre cualquier asunto...? ¿Por qué agredir,
ofender, calumniar, injuriar e insultar a quien te ha puesto en las manos una
modesta idea para que la valores y opines con racionalidad sobre ella, para que
la enriquezcas y pongas tu grano de arena también...?
Por otro lado, las
mencionadas interpretaciones que le han dado algunas personas a esta humilde
propuesta que lo único que busca es la unificación, son tan variopintas, que
resulta casi imposible hacer un inventario de ellas… pero, entre dichas
interpretaciones nos encontramos con las que apuntan a un ‘reformismo’ de los
valores culturales y religiosos de la antigua herencia yoruba… Por ello algunos
aseguran que Ifashade ha traicionado la religión, que es un ‘traidor
reformista’ que pretende acabar unilateralmente con el legado africano que dio
vida a nuestras prácticas y creencias religiosas, y así muchos disparates más que
no tienen el más mínimo sentido lógico…
Porque, si yo realmente
albergara ideas de ese tipo no me tomaría las molestias de trabajar y de
emplear mi tiempo en la búsqueda de soluciones a los problemas colectivos que
hoy nos aquejan a muchos de nosotros en nuestros respectivos países -salvo
algunas excepciones, desde luego-, con respecto a la discriminación y la
represión implícita -unas veces disimulada y otras más descaradas- de la que
somos víctimas, simplemente porque no somos cristianos, ni judíos, ni
musulmanes, si no, ‘brujitos de barrio’, como peyorativamente nos tratan en
muchos lugares…
Y, por favor, quienes hoy
gozan en sus respectivos países (¡muy pocos, por cierto!), de plenas libertades
para practicar sus afro-religiones sin tener que soportar la censura, el
control, la vigilancia y hasta el castigo de las autoridades y la sociedad en
general, les pediría humildemente que no juzguen ni exijan a los demás que no
gozamos de tales libertades en nuestros países, que actuemos como ellos, pues
carecemos del privilegio de tales libertades, y por dicha razón estamos
obligados a buscar otras alternativas de solución a nuestro problema, aunque
tales soluciones a veces no sea del agrado de aquellos… Es así, cada cual debe
buscar sus propias soluciones adaptadas a las condiciones y exigencias de la
sociedad en la que vive, pues de lo contrario nuestras tradiciones morirían en
dichas sociedades.
¡Por ahí escuché o leí a
alguien que asegura que yo pretendo acabar con una historia religiosa de 8000
años, inventándole ‘reformas’, cambiando el sentido original y natural de sus
contenidos conceptuales y litúrgicos...! ¡Que absurdo...! Si entender que matar
a una persona, abrir un hueco donde queramos y enterrarla sin más y sin darle
cuentas a nadie, ni responder por ello -como posiblemente sucediese hace 8000
años-, que eso se puede seguir haciendo ahora en pleno siglo XXI sin
consecuencias de ninguna clase, pues simplemente es un desfase, un delirio, un
imposible… Porque -hoy por hoy- nadie puede hacer eso en ninguna de las
sociedades de la tierra… ¡Y, eso es lo que pretenden defender algunos para
demostrar que son practicantes y seguidores de lo más original y autentico… y,
no por ello dicha posición deja de ser un desfase...!
O sea, que, si a alguien hoy
se le ocurre decir que tales costumbres arcaicas y desfasadas no pueden
sostenerse hoy en nuestras modernas sociedades, ese alguien es acusado de
‘reformista y traidor a sus principios’ porque pretende destruir las antiguas
tradiciones… ¡Lo mismo que algunos intentan hacer con Ifashade ahora...!
Si dialécticamente expreso
mi humilde oposición relativa a que el pueblo afro-religioso actual, piense y
actúe como lo hacía aquel pueblo religioso de la época de Tutankamon u otros
faraones egipcios, eso es interpretado como ‘reformismo con clara tendencia a
destruir un legado’, ¡pues arreglados estamos...! Lo cual parece que quiere
decir que para que seamos ‘auténticos tradicionalistas’, debemos seguir
vistiéndonos con taparrabos, andando sin calzados, viviendo de la caza y la
pesca rudimentarias, haciendo sacrificios humanos a nuestros dioses, sometidos
a una esperanza de vida de 35 años, viviendo y actuando como salvajes… ¡Pues,
simplemente no.! No podemos vivir en pleno siglo XXI como si estuviésemos
viviendo en una sociedad primitiva de 8000 años atrás, porque eso es
simplemente absurdo, porque hay cosas que necesariamente deben cambiar, aspectos
que se deben adaptar a nuestras necesidades y condiciones de vida actuales… ¡Y,
si esto es ‘reformismo malicioso y traidor’, pues que venga Dios y lo vea...!
Y, de todo esto ahora se me
acusa… de ‘reformista’ y ‘de ángel exterminador’ de las antiguas tradiciones
religiosas yorubas, no sin aprovechar para acusarme también como ‘falso Araba’
(¡después de más de 10 años desempeñándome y respetado como tal, tanto en la
propia África, como en occidente..!), única y exclusivamente porque a un hijo
del Arabá Olu Isese Agbaye de Ife -por absurdas rencillas personales que
tenemos desde hace tiempo, y que son ajenas a todo esto de la susodicha
‘iglesia’-, dejándose llevar por vulgares sentimientos de ‘revanchismo y odio’, se le ocurrió la
disparatada idea de hacer un video en La Habana, para decir que ‘yo no soy
Arabá’, única y simplemente porque su padre (el Arabá de Ilé-Ifé) no quiere que
yo utilice el término ‘Agbaye’ (mundial) en mi título… porque dicen que tal
palabra ‘Agbaye’ está reservada solamente para el Arabá de Ife… Y, claro, si
este señor quiere adueñarse de tal expresión idiomática por caprichos, entonces
¿cómo voy a expresar yo en mi título, que soy el Arabá o Jefe ‘mundial’ del
Linaje Odugbemi...? ¡Tengo que utilizar tal palabra, porque no hay otra que no
haya sido acaparada en exclusiva por este señor...! Es simplemente absurdo y
anacrónico…
Y, todo esto es un muy
contradictorio, pues -como dije antes-, después de 12 años actuando como ‘Arabá
Agbaye (mundial) del Linaje Odugbemi’ en todas partes, incluso en toda Nigeria
y en cuanto país occidental he visitado, después de una humilde historia de
trabajo religioso de más de 20 años (ver un modesto resumen en
Odugbemi.blogspot.com.es, en un artículo denominado ‘Respondiendo a los
Aworenis cubanos I’), venir con ese tipo de maliciosas y calumniosas
afirmaciones, es simplemente absurdo y muy mal intencionado… aunque no dejo de
reconocer que a quienes no me conocen, estos teatros -por supuesto- les
confunden, desde luego…
Pero, lo más triste de todo
esto, es que a un montón de oportunistas de turno - ¡que nunca faltan! - todo
esto les sirve para atacar, para socavar e intentar debilitar la posición
ético-moral de Ifashade Odugbemi en sus estúpidos intentos por ‘borrarme del
mapa’… Pero, bien, ¿qué le puedo hacer a todo esto...? ¡Pues, nada...! Aunque…
Sí… quizás tan solo a invitarles a ver el blog mencionado para que conozcan
otra versión (la única que hay verdadera) de la historia, sobre todo el por qué
soy desde el 2006 ‘Arabá Agbayé y Padre del Linaje Internacional Odugbemi’, y
‘por mandato de quién lo soy y lo seré hasta el final’… Y, entonces, quizás los
que se hayan dejado confundir se aclaren las ideas y se den cuenta que mi
título de Arabá Agbaye Odugbemi absolutamente nada tiene que ver con el Arabá
Olu Isese Agbaye Aworeni de Ilé-Ifé, porque me fue otorgado por quien mismo le
otorgó el suyo a dicho señor… ¡Y, donde manda capitán, no nada soldado..!
Ahora bien… hablo de todas
estas cosas porque -como cualquiera de ustedes- tengo plena consciencia de mis
derechos a expresarme y a decir lo que quiera -con respeto, desde luego-, y por
ello lo hago… Y, aprovecho también esta ocasión para responder a quienes se
preguntan vulgarmente -tal como he leído por ahí a algún despistado que ni tan
siquiera me conoce, salvo por las referencias que le han dado-, ¿Quién ‘coño’
es Ifashade para pretender organizar la religión...?
Y, es muy simple la
respuesta… y, sin necesidad de ser obsceno ni de utilizar un lenguaje tan
vulgar y repulsivo: ‘pues, Ifashade, opina, sugiere y recomienda lo que cree
que es lo mejor para todos los afro-religiosos, sin imponer nada -¡porque no
puedo ni soy nadie para ello!-, Ifashade habla y expresa libremente lo que
piensa, y nada más… ejerce su legítimo derecho a opinar y a hablar lo que
quiera, siempre y cuando no le falte el respeto a nadie… Así de simple, así de
sencillo… Y, esto no le debe dar razones a nadie para pensar o interpretar que
persigo liderazgos, ni encabezar revoluciones, pues ni tengo edad, ni salud, ni
deseos de nada de ello, pues lo único que sueño es ver algún día -antes de irme
de este mundo-, es ver a mi religión fuerte, sólida, y libre de
discriminaciones y tribulaciones… Y, nada más…
O sea, que, si sugiero, si
doy mis modestas ideas, son para ustedes, para las nuevas generaciones de
afro-religiosos que se interesen por ellas y que son quienes deben llevar todo
el peso de la responsabilidad de mantener esta religión sana y firme de cara al
futuro… y nada más… Lo demás, es pura interpretación maliciosa y oportunismo
fuera de lugar’… Así que, quienes hoy me atacan, me ofenden, me emplazan y me
dicen lo que se les ocurre, porque pienso diferente a ellos, sencillamente
pierden el tiempo, porque yo seguiré siendo el mismo mientras pueda, aunque es
cierto que sin aspiraciones de liderazgos, ni de ser cabeza de absolutamente
nada, pues ya estoy en el final de mi recorrido, y lo único que estoy tratando
es de transmitir lo que humilde y modestamente he aprendido para que tales
conocimientos no se vayan conmigo el día que me toque partir de este mundo…
Por lo tanto, les guste o no
a algunos, seguiré siendo Arabá Agbayé del Linaje Odugbemi hasta el final, diga
lo contrario quien lo diga, pues quien lo dijo y sentenció un día, lo hizo, y
fue para siempre (si quieren véanlo por ustedes mismos en el blog sugerido) …
Por lo tanto, seguiré
pensando y defendiendo la idea o proyecto de una organización afro-religiosa
mundial como la que he propuesto a todos, llámese finalmente ‘iglesia’ o como
se llame, y se le otorguen las cualidades atributos que sean… porque tengo la convicción
de que es el único camino hacia la conquista de la estabilidad y afianzamiento
definitivo de nuestra fe en estas sociedades donde vivimos… Y, esto no lo van
cambiar quienes me agreden, me ofenden y me calumnian, a golpes de ofensas,
falsos testimonios y acciones oportunistas de todo tipo… Y, sobre todo esto por
supuesto que tengo mucho que decir (¡podría llenar decenas de cuartillas
enteras!), pero prefiero decirles a todos esos que pierden el tiempo
miserablemente… porque ni yo voy a cambiar, ni voy a dejar de pensar como
pienso, y que voy a seguir intentando dar lo que modestamente pueda ofrecer a
quienes quieran recibir… ¡Y, eso es todo...! Lo demás se lo dejo a ustedes…
Y, por ultimo quiero dejar
muy patente que es la última vez que me detengo a aclarar o a dar testimonios
sobre mí mismo, pues para saber de mí no hace ninguna falta que yo explique
nada, mi modesta historia de más de 20 años dedicada al Tradicionalismo
Religioso Yoruba está sobradamente documentada por todas partes, y no necesita ser
publicitada porque de hecho lo está desde hace mucho tiempo… Y, con esto quiero
decir que quienes hoy intentan borrar de un plumazo una humilde historia de
trabajos y sacrificios de más de dos décadas de luchas y esfuerzos, lo único
que van a conseguir es perder miserablemente su tiempo, pues mi historia -para
bien o para mal- está escrita desde hace mucho tiempo, mientras las de ellos
aún están por escribirse…
Así que, esos enemigos que
de ‘gratis’ me aparecen por ahí, ni pierdan más el tiempo en socavarme, ni a mí,
ni al Linaje Odugbemi, ¡porque -lo quieran o no algunos ‘disidentes’ y enemigos
naturales de lo que representamos- este linaje vino para quedarse y para
demostrar al mundo que para ser un Tradicionalista Religioso Yoruba no es
necesario vivir y comportarse como cavernícolas, ni como salvajes que vivieron
hace 8000 años...! Este linaje vino para hacer bien las cosas, no para tolerar,
ni para servir de refugio a transgresores y anarquistas, a indisciplinados y a
quienes buscan estúpidos protagonismos, sobre todo a quienes pretenden recibir
las bendiciones de Orunmila y Orisas sin prepararse, sin estudiar, sin aprender
correctamente los principios básicos que nos guían a todos los Odugbemis…
Este linaje continuará
indetenible su camino hacia el futuro, y caerán todos aquellos que no merezcan
estar en él, sean unos cuantos o sean miles - ¡da igual! -, porque no perseguimos
masividad, si no, calidad en los miembros de nuestra gran familia espiritual y
religiosa… Es por ello que siempre trabajamos preferiblemente en las
iniciaciones colectivas masivas, porque sabemos que el porcentaje final de
quienes se mantendrán firmes, será muy reducido, porque Ifá depura por sí mismo
sus filas, y de ellas -en nuestro caso- siempre caerán los que no merecen ser
Odugbemis, así de claro, así de simple… Y, esto se manifiesta en que unos se
van por sus propios pies, mientras a otros los echamos, da igual… Odugbemi es
un linaje en el cual la depuración es permanente, porque no queremos que nadie
viva entre nosotros de sus glorias y memorias, si no del esfuerzo y del
sacrificio del día a día, demostrando que sus principios y su lealtad a la gran
familia afro-religiosa a la que pertenece, siempre está a la altura y a plena
disposición de la hermandad.
Y, que seguiré trabajando en
el proyecto Unificador Afro-céntrico, llamémosle ‘iglesia’ o no, o decidamos
llamarle como acordemos o no… será una inexorable realidad… ¡Y, nada ni nadie
lo detendrá...! Y, sé que ya habrán oídos receptivos que escuchen y corazones
afines que acepten tales ideas y propósitos, y -sean pocos o sean muchos-,
serán los que tengan que ser… ¡Y, con eso ya me sentiré plenamente satisfecho...!
Y, concluyo diciéndoles a
todos mis críticos actuales, que… Tristemente, ¡no han entendido nada...!
Odaro,
Ifashade Odugbemi.